De periodistas

"La cotorra le preguntó al buho: ¿que cosa es un periodista? Y el búho, tras reflexionar un instante, le respondió: el periodista es un ente que, por fatalidad de oficio, está condenado a escribir todo de todo sin saber nada de nada."
(El Banquete de Severo Arcángelo - Leopoldo Marechal)




 1 Tal vez ya no hagan falta quienes describan con belleza el mundo, como este extraordinario periodista polaco. Hoy el mundo nos viene en crudo, por You Tube. Algo hemos perdido con la tiranía audiovisual internetera. Para comprobarlo (si da el estómago para soportar tamaño  horror) ver el video de la tortura y asesinato del "sargento/general/presidente" de Liberia  Samuel Doe perpetrado por otros "generales" (de ejércitos caníbales) oponentes. Y luego leer el fascinante "Ebano", donde Kapuscinski describe la misma Liberia de Doe, la misma Africa primitiva, brutal y hambrienta, solo que humanizada a través de la mirada de un hombre digno.

2 Este maestro de periodistas era un tipo comprometido con el comunismo previo al colapso la URSS. Pero sus libros son fascinantes no por la ideología sino por la prosa y la mirada del autor.  Desde que el Gobierno de Néstor comenzó su encarnizada guerra con Clarín muchos periodistas argentinos se "comprometieron" con uno de los dos bandos en pugna: pero, ay,ay,ay,ay..., se convirtieron en "periodistas militantes". Creyéndose aquello de que "se está en una vereda o en la otra" se dedicaron a producir artículos, programas y libros tendenciosos, previsibles y aburridísimos, donde lo que importa es la ideología. Es normal que exista prensa partidaria (aunque caiga en la propaganda, la manipulación y lo panfletario) pero estoy convencido de que hoy está sobredimensionada y que ocupa espacios (en los medios públicos, en los del grupo Clarín) que no le corresponde. Pero por suerte para mí y para muchos otros, hay también un espacio de prensa inteligente, plural, "independiente" (aunque sabemos ya que no hay miradas asépticas, puras, "objetivas") que hablan con todos. Por eso, si bien es cierto que en el periodismo argentino no abundan los Kapuscinski y que hay un desperdicio enorme de cerebros y medios en una inútil pelea que pareció importante, hay, eso sí, una absoluta libertad de prensa.

3 Hoy cualquiera puede decir en los medios cualquier cosa, sea verdad o mentira, un conocimiento profundo o una soberana pelotudez. Lo que me sorprende es la abundancia de esto último. Todos los días en televisión y radio ejercen de periodistas tipos como los que describe Marechal, preocupados más por sus looks que por lo que van a decir, pero, por sobretodo, preocupados por el "rating" o sea la cantidad de televidentes u oyentes que tienen, lo que indica cuanto puede facturar en publicidad.  Para vender representan personajes con los que captan aquella parte del público que se identifica con ciertas características.
 La presencia de un tal Baby Etchecopar en Radio 10 (la Radio más escuchada) al mediodía es un extraordinario ejemplo de este tipo de periodista y un indicador de que algo está muy mal en los medios argentinos. El personaje de Baby vende frontalidad, demuestra "no tener pelos en la lengua", y siempre opina sobre todo, diciendo generalmente cualquier cosa, en forma descarnada y brutal para cosechar aplausos entusiastas de los que admiran o aprecian esta forma de expresarse. El Angel que así se llama el personaje es un tipo violento, agresivo, intelectualmente mediocre, maltratador, grosero, que tiene una audiencia de abuelitas (a las que hace callar al grito de "Cállese, vieja e´ mierda!) y amas de casa a las que inspira insospechadamente una evidente ternura. Intentar escucharlo un rato (antes de vomitar) es un verdadero trip: en una especie de trance don Baby se pasa 2 horas al micrófono opinando ligeramente sobre todo, juzgando a todos, disfrutando de escucharse, diciendo lo primero que se le ocurre, agrediendo y maltratando a quienes lo llaman por teléfono tiernos, emocionados, por poder hablar con él. Porqué este tipo está en la radio? Y, aún más extraño, porqué hay un público que lo escucha?
 De Kapuscinski a Etchecopar, del conocimiento a la estupidez, del periodista al vendedor egocéntrico con micrófono hay una enorme distancia. En nuestros medios los Etchecopar, los "periodistas militantes" son el espejo donde mirarnos para entender cuanto nos falta para ser una sociedad madura, inteligente y consciente.
                                      Para que sirvió el despelote de la Ley de medios?